Partiré

Con el penar de la mañana y con la ausencia Con el beso que llega con la brisa Con la muerte que se invita a las puertas del silencio Y con los ojos del mundo que hace añicos los espejos Partiré

Con la infinita sed de arena que arrastran los rosarios Con las palabras que desenmascaran las soledades de los tiempos Con los senderos que toman los hombres de la luna Y con el peso de la carne que levita y toma altura Partiré

Con el ala del gorrión que ve cómo atardece, con el néctar de las flores Con el aire rugoso que sopla en la encrucijada de las sombras Con el corazón que lucha, con el corazón siempre engañado Y con la insoportable inconsistencia de los números Partiré

Con la melancolía del árbol sin raíces Con las manos que se tienden a pesar de todo felices Con las caladas sábanas hasta los sueños, con la letra asesina Y con lo inesperado donde la esperanza aguarda Partiré